Cuando piensas en una cirugía plástica debes considerar una variedad de factores, por ejemplo, el estilo de vida, la genética y la salud general. Además en muchas ocasiones se toma en cuenta otro aspecto que puede representar un tabú, se trata de la edad, la cual suele ser causante de polémica, debido a que muchas personas opinan que la cirugía plástica en adolescentes o en adultos mayores no es viable.
Hay muchas características que influyen en un cirujano y que lo llevarán a estar de acuerdo o no, en realizar un procedimiento. La edad para la cirugía plástica, por supuesto debe ser evaluada cuidadosamente, junto con la salud física y el estado mental, y aunque algunos especialistas son reacios a realizar una operación basados en la cantidad de años que posee una persona, la verdad, es que la mayoría se preocupa más por analizar el estado general del candidato o candidata.
Edad y Cirugía Plástica: Los adolescentes y el quirófano
Las cifras
De acuerdo con la Sociedad Americana de Cirugía Plástica Estética (ASAPS), en 2013, se realizaron más de 113.000 procedimientos en individuos menores de edad – una cifra que comprendía aproximadamente el 1% del número total de cirugías plásticas realizadas ese año.
Y a pesar de los informes en los medios de comunicación sobre las tendencias de la adolescencia, el número de adolescentes que optan por la cirugía estética ha disminuido paulatinamente. ASAPS informa que en el 2002, las personas menores de 18 años conformaban el 3,2% del total de procedimientos realizados, un porcentaje que ha disminuido constantemente a medida que pasa el tiempo.
El lado positivo
Mientras que algunas personas se empeñan en determinar una edad para la cirugía plástica, y ven en los procedimientos estéticos para adolescentes una luz negativa, la práctica puede ser muy positiva para aquellos que han sido evaluados correctamente.
Los procedimientos de cirugía plástica para adolescentes generalmente tratan características que han causado inseguridad al paciente durante toda su vida, como las asimetrías o anomalías.
Algunas de las operaciones quirúrgicas más populares que se realizan entre este grupo demográfico incluyen la cirugía de orejas, rinoplastia y reducción de senos. Por ejemplo, la otoplastia o cirugía de orejas, sigue siendo una de las más populares entre los más jóvenes, pues es recomendable realizar este procedimiento cuando el niño tiene 5 o 6 años de vida, de esta manera, las orejas han alcanzado el máximo de su crecimiento, y se podrá realizar la cirugía correctiva antes de que el infante ingrese a la escuela primaria y empiece a sufrir burlas por parte de sus compañeros.
Edad y Cirugía Plástica: La cirugía plástica durante los años dorados
Estadísticas de La ASAPS revelan que aproximadamente el 9,7% de los individuos que recibieron procedimientos cosméticos quirúrgicos o no quirúrgicos el año pasado, tenían 65 años o más. La edad puede traer consigo una serie de factores como las enfermedades crónicas y la movilidad limitada, que hacen que la cirugía represente algún tipo de complicación, sin embargo, con una evaluación física y mental profunda, los médicos tienen la opción de evaluar los posibles riesgos y determinar para cada caso si el procedimiento es seguro o no.
Un artículo publicado en el periódico “New York Times” informa que los procedimientos estéticos, constituyen una gran ayuda para las personas mayores que buscan un impulso en la autoestima, y por este motivo, el número de pacientes de 70 años o más, ha estado en un alza constante. Estas personas se encuentran en buen estado de salud y quieren ser parte activa de la sociedad.
Consideraciones para hacer sobre la edad y la cirugía plástica
La edad en la cirugía plástica es uno de los puntos a evaluar a la hora de realizarse un procedimiento, sin embargo, en general, todos los pacientes que solicitan cirugías plásticas deben ser sometidos a una evaluación con un cirujano plástico certificado por la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica y Reconstructiva, como el Dr. Carlos Triana, ya que este profesional puede ayudar a determinar qué procedimientos son los más adecuados para un individuo. Durante estas sesiones, el médico llevará a cabo una serie de evaluaciones para medir la elegibilidad de la persona, incluyendo la salud mental, la madurez física, las expectativas y los riesgos.