La Otoplastia, comúnmente conocida como operación de orejas, es una excelente opción para mejorar tu apariencia, tu autoestima y tu calidad de vida en general. La operación de orejas es un procedimiento muy popular tanto en niños como en adultos, pues permite la corrección del aspecto del rostro al armonizar todos sus elementos.
A partir de la adolescencia muchas personas empiezan a sentirse inconformes con el tamaño y la forma de sus orejas, entre las quejas más comunes se encuentran las protuberancias en algunos lugares, deformidades, asimetrías en el tamaño y en ciertos casos, el agrandamiento del lóbulo que por efecto de la gravedad cae tomando mayores proporciones.
Muchos niños y adolescentes pueden sufrir burlas en la escuela por el aspecto de sus orejas, lo que puede llevar a un aislamiento o a una mala adaptación al ambiente escolar. Para las personas adultas puede ser un gran esfuerzo ocultar sus orejas imperfectas por medio de accesorios o cortes de cabello. La Otoplastia u operación de orejas puede ayudarte a cambiar la manera cómo te sientes y te ves a ti mismo.
El Cirujano
Este procedimiento debe ser realizado por un cirujano plástico de larga trayectoria y experiencia. Una cirugía plástica exitosa depende de la buena relación entre el paciente y el cirujano; esta relación se basa en la confianza que tengas en la experiencia clínica de tu médico y las expectativas realistas que tengas sobre los posibles resultados.
Este vínculo comienza a desarrollarse durante el proceso de consulta previa a la cirugía de orejas, en la cual debes discutir con el cirujano plástico las metas estéticas que tienes con el procedimiento, tu historia clínica y el mejor camino para lograr el aspecto deseado, pues con la operación tus orejas pueden ser reposicionadas, reformadas o reducidas en tamaño.
¿La operación de orejas es el mejor procedimiento para mí?
Para ver si la operación de orejas es adecuada para ti, debes tener en cuenta que con este procedimiento se corrigen diferentes aspectos, tales como:
· Orejas agrandadas
· Orejas caídas
· Orejas protuberantes
· Deformidades de la oreja
· También se pueden realizar otros procedimientos como contornear o remodelar tu oreja
La operación de orejas es una decisión personal y debes pensar si es lo que deseas de manera definitiva para mejorar tu imagen.
Para ser candidato a una operación de orejas debes estar en buen estado físico y mental, pero si estás pensando en este procedimiento para tus hijos, una consulta con el cirujano puede ayudarte a decidir qué es lo mejor para ellos, no sólo estéticamente, sino también psicológica y físicamente.
Una de las ventajas que representa la realización de esta cirugía a temprana edad, es que el cartílago de los niños es extremadamente flexible, permitiendo un moldeado más fácil y proporcionándole beneficios psicológicos inmediatos.
Beneficios de la operación de orejas
Son muchos los beneficios que puedes obtener con una operación de orejas, pero el más importante es el cambio de tu estado emocional y psicológico.
Esta intervención puede corregir una gran variedad de imperfecciones y ayuda a los menores y adolescentes a tener un ambiente más sano y sin burlas por parte de sus compañeros. Además es un procedimiento seguro en el que corres muy pocos riesgos y su tiempo de recuperación es mínimo, teniendo un periodo de inactividad física de aproximadamente una semana. En el caso de los adultos puede ser combinada con otros procedimientos que ayudarán a armonizar el rostro, como lo son la rinoplastia y la cirugía de mentón.